sábado, 13 de junio de 2009

Gatos siameses


Antiguamente se decía que los primeros soberanos de Siam, al morir, habían fundido sus almas en un gato siamés para poder estar presentes en la coronación de sus sucesores.
Por eso, en los siglos pasados, estos gatos tenían un papel importante en los funerales de los reyes de Siam. Se los colocaba dentro de la tumba y cuando salían, por un orificio hecho para ese fin, se decía que el alma del monarca había entrado en el gato. Luego se llevaba el gato a la ceremonia de coronación del nuevo rey, con el objetivo de que el rey anterior pudiera presenciara.
Los gatos de Siam vivían en el palacio y eran tratados como parte de la familia real. También formaban parte de las ceremonias religiosas con las que se invocaban las lluvias.



En Oriente, muchos de estos gatos eran bizcos y tenían sus colas enroscadas.
Se decía que a ellos se les había encomendado el cuidado de los tesoros reales y lo habían asumido con tanta fidelidad que se habían quedado bizcos custodiándolo. Y que la cola enrosacada se debía que en ella dejaban sus anillos las princesas mientras se bañaban, por eso los gatos las habían enroscado, para cuidarlos mejor.
Cuando la raza pasó a Occidente, estas características empezaron a ser vistas como defectos. En consecuencia,los criadores fueron eliminándolas de la raza, mediante cruces selectivos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario