Este hermoso muchachito
y esta niñita carey
que todavía no tienen nombre, son los nuevos gatos del Refugio Encanto Blanco
Dos auténticos gatos de montaña
martes, 20 de diciembre de 2011
viernes, 16 de diciembre de 2011
jueves, 15 de diciembre de 2011
lunes, 28 de noviembre de 2011
Nyan cat
Algunos se preguntarán cuál es la novedad. Es que yo tardé en enterarme!Y todavía n o lo entiendo.
Pero este invento, ya dio la vuelta al mundo y hay versiones de todos los países.
Versiones argentinas, también. Como esta, con música de Mariano Mores
y esta otra
que no es la única versión política, pero por tratarse de nuestra presidenta, es la que elijo para compartir
Pero este invento, ya dio la vuelta al mundo y hay versiones de todos los países.
Versiones argentinas, también. Como esta, con música de Mariano Mores
y esta otra
que no es la única versión política, pero por tratarse de nuestra presidenta, es la que elijo para compartir
viernes, 25 de noviembre de 2011
Lilith logró lo que nadie había logrado hasta ahora...
¡que Cervantes se enojara!!
Finalmente consiguió que la arañara. Después de eso ya no juega con él mordiéndolo... sino dándole besitos
Finalmente consiguió que la arañara. Después de eso ya no juega con él mordiéndolo... sino dándole besitos
miércoles, 23 de noviembre de 2011
martes, 22 de noviembre de 2011
Como éramos pocos... Lilith!
Los otros días anduvimos por Las Golondrinas, buscando a una nueva integrante de la familia: Lilith
Dulcineíta panzona
lunes, 14 de noviembre de 2011
Más crítica de arte
sábado, 12 de noviembre de 2011
miércoles, 2 de noviembre de 2011
Meu gato
Meu gato não é um gatinho qualquer...
Quando me beija e abraça é só ternura e emoção
Me caça no meio da noite ronronado e querendo atenção
Me olha com olhar de amor e paixão
Namoramos em tempo integral
As vezes sou caça, as vezes eu caço
E todas as noites eu o tenho lindo e majestoso
Ronronando em minha cama
Rita Lee
Quando me beija e abraça é só ternura e emoção
Me caça no meio da noite ronronado e querendo atenção
Me olha com olhar de amor e paixão
Namoramos em tempo integral
As vezes sou caça, as vezes eu caço
E todas as noites eu o tenho lindo e majestoso
Ronronando em minha cama
Rita Lee
Etiquetas:
Los gatos en la literatura - poesía
martes, 1 de noviembre de 2011
domingo, 30 de octubre de 2011
viernes, 21 de octubre de 2011
miércoles, 19 de octubre de 2011
El Negro de París
El Negro es un gato tranquilo, distante, tosco a veces, sin ser grosero. Mi papá y yo fuimos a buscarlo una tardea la Sociedad Protectora de Animales de París. Habíamos llegado tiempo atrás a Francia, y yo me sentía muy solo,sin entender por qué habíamos dejado Buenos Aires con tanto apuro.Mi papá y mi mamá me explicaron muchas veces que corríamos peligro mientras los militares gobernaran en el país y que sería mejor que yo creciera y fuera a una escuela en un lugar donde me enseñarían a vivir en libertad.Cuando nos fuimos de Buenos Aires no tuvimos tiempo de llevarnos nuestras cosas; yo tuve que dejar un triciclo yun largo tren eléctrico que hacía marchar entre montañas, bosques y ríos que cabían sobre la mesa del comedor.Pero lo que más me dolió fue dejar a Pulqui, que dormía conmigo hecha una bolita tibia, acurrucada entre mis piernas, hasta que me despertaba a la mañana, siempre a la misma hora, para ir al colegio.Cuando llegó el momento de ir a tomar el avión, mi tío Casimiro vino a buscarla y me dijo que no estuvieratriste, que él la cuidaría y cuando volviéramos iría con ella a buscarnos al aeropuerto. Me lo prometió, esperó quela acariciara un rato y después la metimos en una canasta de mimbre. La oí maullar mientras mi mamá me abrazabay me apretaba muy fuerte y me decía que pronto volvería a verla.Llegamos a Francia y tuve que hacer nuevos amigos que hablaban un idioma cantarín y engolado que al principio no entendía. Todo era nuevo para mí: el idioma, pero también la nieve, las calles que terminabanenseguida y si uno doblaba una esquina, se perdía, porque en París es imposible dar la vuelta a la manzana. Lesmuestro el plano de mi barrio y díganme ustedes cómo harían para ubicarse en este enjambre de callecitas.¡Lindo lío! No sé cómo se las arreglará el cartero para ir y venir por ese jeroglífico, pero de vez en cuando traíauna carta de mi tío Casimiro para papá y mamá y una foto de Pulqui
para mí.Pero la foto no me bastaba. Yo quería acariciarla y jugar con ella, y tanto la extrañaba que un día mi papá me propuso que le buscáramos un amigo. Un lindo gato que pudiera recorrer las calles de París sin perderse y quealguna vez llevaríamos con nosotros a la Argentina para que se reuniera con Pulqui y le contara cómo es estaciudad vista desde los techos.Entonces una tarde fuimos en ómnibus a la Sociedad Protectora de Animales y encontramos al Negro.
Había muchos gatos y perros y gente que los miraba y hablaba. Daban lástima, ahí encerrados esperando quealguien viniera a buscarlos. Yo hubiera querido llevármelos a todos, perros y gatos, pero tenía razón mi mamácuando me dijo que no había lugar en casa para todo el mundo. Nuestro departamento era muy chiquito y hubierasido un lío tenerlos a todos sobre la cama, sobre el ropero, en la bañadera y hasta en los cajones de los armarios.Así que estuvimos mirando hasta que vi al Negro.
Estaba sobre un tronco largo que atravesaba la jaula, echado,con la mirada distante como si soñara. No bien lo vi con esos ojos redondos como cacerolas y esos bigotes largoscomo cañas de pescar, me pareció que lo conocía de toda la vida. Me dije que a Pulqui le gustaría que lelleváramos un amigo así. Lo llamé a través del alambre,mish, mish, mish, mishmish, y tardó un rato en mover lacabeza y mirarme como diciendo: “Callate, no hagas el ridículo ¿querés?” De modo que cerré la boca, sonreí, loseñalé con el dedo y le dije a mi papá:
-Ese todo negro, llevemos ese que tiene cara de zonzo.
(fragmento)
Osvaldo Soriano
para mí.Pero la foto no me bastaba. Yo quería acariciarla y jugar con ella, y tanto la extrañaba que un día mi papá me propuso que le buscáramos un amigo. Un lindo gato que pudiera recorrer las calles de París sin perderse y quealguna vez llevaríamos con nosotros a la Argentina para que se reuniera con Pulqui y le contara cómo es estaciudad vista desde los techos.Entonces una tarde fuimos en ómnibus a la Sociedad Protectora de Animales y encontramos al Negro.
Había muchos gatos y perros y gente que los miraba y hablaba. Daban lástima, ahí encerrados esperando quealguien viniera a buscarlos. Yo hubiera querido llevármelos a todos, perros y gatos, pero tenía razón mi mamácuando me dijo que no había lugar en casa para todo el mundo. Nuestro departamento era muy chiquito y hubierasido un lío tenerlos a todos sobre la cama, sobre el ropero, en la bañadera y hasta en los cajones de los armarios.Así que estuvimos mirando hasta que vi al Negro.
Estaba sobre un tronco largo que atravesaba la jaula, echado,con la mirada distante como si soñara. No bien lo vi con esos ojos redondos como cacerolas y esos bigotes largoscomo cañas de pescar, me pareció que lo conocía de toda la vida. Me dije que a Pulqui le gustaría que lelleváramos un amigo así. Lo llamé a través del alambre,mish, mish, mish, mishmish, y tardó un rato en mover lacabeza y mirarme como diciendo: “Callate, no hagas el ridículo ¿querés?” De modo que cerré la boca, sonreí, loseñalé con el dedo y le dije a mi papá:
-Ese todo negro, llevemos ese que tiene cara de zonzo.
(fragmento)
Osvaldo Soriano
Etiquetas:
Los gatos en la literatura para chicos
martes, 11 de octubre de 2011
Pandora, de Bahía Blanca
martes, 4 de octubre de 2011
jueves, 22 de septiembre de 2011
Del temeroso espanto cencerril y gatuno que recibió don Quijote en el discurso de los amores de la enamorada Altisidora.
Aquí llegaba don Quijote de su canto, a quien estaban escuchando el duque y la duquesa, Altisidora y casi toda la gente del castillo, cuando de improviso, desde encima de un corredor que sobre la reja de don Quijote a plomo caía, descolgaron un cordel donde venían más de cien cencerros asidos, y luego tras ellos derramaron un gran saco de gatos, que asimismo traían cencerros menores atados a las colas. Fue tan grande el ruido de los cencerros y el mayar de los gatos, que aunque los duques habían sido inventores de la burla, todavía les sobresaltó, y, temeroso don Quijote, quedó pasmado. Y quiso la suerte que dos o tres gatos se entraron por la reja de su estancia, y dando de una parte a otra parecía que una región de diablos andaba en ella: apagaron las velas que en el aposento ardían y andaban buscando por do escaparse. El descolgar y subir del cordel de los grandes cencerros no cesaba; la mayor parte de la gente del castillo, que no sabía la verdad del caso, estaba suspensa y admirada.
Levantóse don Quijote en pie y, poniendo mano a la espada, comenzó a tirar estocadas por la reja y a decir a grandes voces:
—¡Afuera, malignos encantadores! ¡Afuera, canalla hechiceresca, que yo soy don Quijote de la Mancha, contra quien no valen ni tienen fuerza vuestras malas intenciones!
Y volviéndose a los gatos que andaban por el aposento les tiró muchas cuchilladas. Ellos acudieron a la reja y por allí se salieron, aunque uno, viéndose tan acosado de las cuchilladas de don Quijote, le saltó al rostro y le asió de las narices con las uñas y los dientes, por cuyo dolor don Quijote comenzó a dar los mayores gritos que pudo. Oyendo lo cual el duque y la duquesa, y considerando lo que podía ser, con mucha presteza acudieron a su estancia y, abriendo con llave maestra, vieron al pobre caballero pugnando con todas sus fuerzas por arrancar el gato de su rostro. Entraron con luces y vieron la desigual pelea; acudió el duque a despartirla, y don Quijote dijo a voces:
—¡No me le quite nadie! ¡Déjenme mano a mano con este demonio, con este hechicero, con este encantador, que yo le daré a entender de mí a él quién es don Quijote de la Mancha!
Pero el gato, no curándose destas amenazas, gruñía y apretaba; mas en fin el duque se le desarraigó y le echó por la reja.
CERVANTES, M., Don Quijote de la Mancha, Segunda Parte, capítulo XLVI.
Después de lo cual don Quijote quedó de cama, tal como lo muestra este grabado, de la serie de ilustraciones a "El Quijote" de Gustave Doré.
Levantóse don Quijote en pie y, poniendo mano a la espada, comenzó a tirar estocadas por la reja y a decir a grandes voces:
—¡Afuera, malignos encantadores! ¡Afuera, canalla hechiceresca, que yo soy don Quijote de la Mancha, contra quien no valen ni tienen fuerza vuestras malas intenciones!
Y volviéndose a los gatos que andaban por el aposento les tiró muchas cuchilladas. Ellos acudieron a la reja y por allí se salieron, aunque uno, viéndose tan acosado de las cuchilladas de don Quijote, le saltó al rostro y le asió de las narices con las uñas y los dientes, por cuyo dolor don Quijote comenzó a dar los mayores gritos que pudo. Oyendo lo cual el duque y la duquesa, y considerando lo que podía ser, con mucha presteza acudieron a su estancia y, abriendo con llave maestra, vieron al pobre caballero pugnando con todas sus fuerzas por arrancar el gato de su rostro. Entraron con luces y vieron la desigual pelea; acudió el duque a despartirla, y don Quijote dijo a voces:
—¡No me le quite nadie! ¡Déjenme mano a mano con este demonio, con este hechicero, con este encantador, que yo le daré a entender de mí a él quién es don Quijote de la Mancha!
Pero el gato, no curándose destas amenazas, gruñía y apretaba; mas en fin el duque se le desarraigó y le echó por la reja.
CERVANTES, M., Don Quijote de la Mancha, Segunda Parte, capítulo XLVI.
Después de lo cual don Quijote quedó de cama, tal como lo muestra este grabado, de la serie de ilustraciones a "El Quijote" de Gustave Doré.
Etiquetas:
Los gatos en la literatura - narrativa
martes, 20 de septiembre de 2011
Crítica de arte
jueves, 8 de septiembre de 2011
martes, 30 de agosto de 2011
Frodito de visita
Frodo hijo está por unos días de visita en casa y Cervantes sigue recibiendo su afecto...
Bah... si fuera Cervantes solo!!!!!
martes, 23 de agosto de 2011
domingo, 14 de agosto de 2011
martes, 2 de agosto de 2011
miércoles, 20 de julio de 2011
Disfrutando la nieve
martes, 12 de julio de 2011
lunes, 11 de julio de 2011
domingo, 26 de junio de 2011
Todo tiene sus límites
martes, 14 de junio de 2011
¿La curiosidad mata al gato?
Los bebés de Alma y Frodo ya tienen 15 días
están hermosos y gorditos... hacen ruiditos... y Cervantes se muere de curiosidad, quiere ir a olfatearlos y a "experimentarlos" de cerca
A Alma no le gustaque Cervanbtes se acerque a sus bebés, pero es muy bondadosa
sin ninguna agresividad, lo va alejando de los cachorros
ella se interpone entre sus bebés y el curioso de Cervantes
pero en algún momento ella se tiene que apartar y, por fin, Cervantes llega adonde quería!
están hermosos y gorditos... hacen ruiditos... y Cervantes se muere de curiosidad, quiere ir a olfatearlos y a "experimentarlos" de cerca
A Alma no le gustaque Cervanbtes se acerque a sus bebés, pero es muy bondadosa
sin ninguna agresividad, lo va alejando de los cachorros
ella se interpone entre sus bebés y el curioso de Cervantes
pero en algún momento ella se tiene que apartar y, por fin, Cervantes llega adonde quería!
lunes, 13 de junio de 2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)